Diario de una artista

(Stalkeress)

Summertime-

Dijo él, digno de Lana Sterness, podría haber dicho Awareness, Lana Kelners… no sé qué entendí. Noté su presencia furiosa, amenazadora, el instinto animal me hizo aullar, me escondí debajo de la mesa, junto a las piernas desnudas de V, que escribía descalzo. Me metí el pulgar en la boca, el mío, el mío. Él es mío. Sentí miedo, una amenaza. Le besé los pies, lloriqueé, no mi amo, no me dejes sola, hablaré como vos, decime lo que sea, sólo escribiré para vos. Y como vos, decime. Lo que sea.

Desnúdate.

Qué.

Nada, no había dicho nada, seguía amordazado con el foulard, mi favorito, ahora lleno de babas, el odio de sus ojos, lo juro.

Sin acento.

Sí dijo algo, desnudate es sin acento. Borrá esa tilde.

No quiero que me vea así, hecha una madeja de pelo negro, hilos y pelusas de la cuerda con que mi amor me ataba a él, sucia, perseverant…, perdón, pervertida, perdón mi señor, no volverá a ocurrir. Me vuelvo loca.

Está todo grabado en el móvil, su Señoría.

Ataque de locura transitoria por rabia, la enfermedad del perro.

.

.

.

What I thought she did.

.

-Te has metido con la tía equivocada.

-Definí “meter”.

-You make my nipples hard.

.

.

.

What I thought she did. Los secuestro y me los llevo a otro cuarto.

.

What I thought she did. She did that thing on me.

.

Así pues capturó a S con un lazo por el cuello. V desatado, lanzan la cuerda por encima de una viga del techo- atan a S por las manos, los brazos por encima de la cabeza. V hace toda la maniobra de la cuerda y con su peso tira hacia abajo, S flota por encima del suelo.

Y entonces la chica se acerca con sigilo, no oye sus pisadas, como un gato.

Yo lo tengo que hacer todo. Esta gente no quiere ser feliz. El rock´n ´roll pervierte las mentes.

Beware!

La vida es mucho más que esta casa, más que esto.

¿Qué, esto?

Callate.

V sujetaba la cuerda. Quietaaaa.

No puedo creer lo que estoy oyendo. La chica respiraba pegada a mi espalda.

V miraba.

Imaginé el sabor, el color, lo que mi cerebro animal me anunció, lo que me dijo, entre susurros, ya lo sé.

Aparece ella con sus dedos sucios acariciando espaldas, abriendo sus muslos embutida en un vestido rojo que, obviamente, ha robado de mi armario. Y se sienta en la mesa, y yo estoy aquí colgada, espalda estirada. Y este hombre, claro que quiere coger.

Quién no querría.

Con mi vestido rojo.

Que ella humedece.

Quién no querría.

.

Los cristales se empañan con la transpiración.

Los mantendría aquí conmigo. Y de un plumazo, ¡de un plumazo! Viene ella a.

.

Lo que imaginé, o lo que creo que sí sucedió fue la chica que entró en el salón, y llevaba puesto mi vestido rojo, mi favorito.

Me vi con las manos atadas a una cuerda que ascendía hasta la viga del techo, y ahí abajo, tiraba V con todas sus ganas, el muy cabrón. Yo andaba de puntillas, tenía tanta rabia acumulada que respiraba muy fuerte, me hacía tropezar, y flotaba y quería pisar tierra firme, hundirme en el barro, sentir la tierra otra vez, volver a mi ser. Que mis deditos se hundieran en la arena, en la playa, y que germinaran, agarrarme al planeta… la cabeza se va en esas posiciones.

¡Yo soy quien soy! No lo puedo evitar. Yo soy yo.

Y apareció ella, lo que oí en la grabación del móvil cuando todo acabó fue insólito.

.

.

.

S is for Stalkeress.

.

.

.

(I´m not sure if I´m sorry I kidnapped you again, G.)