From Budapest with love
antes de la conferencia advirtiendo a todo el mundo sobre ellos mismos
Querido diario,
Ayer tomé el sol todo el día después del percance con X y pasar seis horas en el hospital, pude dormir un poco y recordar lo que había venido a hacer aquí.
Ítems imprescindibles: el cuaderno, el portátil y su funda rosa, oro puro; las torcaces, un agujero en el estómago, ansiedad helada. Parálisis. Justo hoy hace 13 años, mi padre me llevó a Urgencias de un hospital ….
Agua con limón para las náuseas. Los ponentes piden té y café. Mi tetera está rellena de agua y un chorro de limón. Agua mineral, del tiempo.
Hace muchos años, mi padre me llevó al hospital.
El amor arrancacorazones, un vampiro húngaro me rompió el corazón, y yo le dejé. Orgullosa como soy, necesitada de afecto, el jenesaisquoi pero húngaro.
Daddy, por fin me las he arreglado para pasar unos días en Budapest donde mi boquita se abrirá para hablar sobre el carácter húngaro a los propios húngaros. El tono muy Sándor Márai, algo así, les contaré de qué va esto del vampirismo czardil.
El crepúsculo acecha, daddy.
La pose. Videoconferencia, videopose, videohollywood.
Cristales dorados, y no he estudiado nada. Repaso mis notas, antes de ducharme y salir de la habitación. No me he duchado. Sudo copiosamente. Sauna y ajedrez, ¿no? Cuál es el plan. Bierchen, oder?
Ach.
Para qué estudias húngaro hoy en día, en 2024. Mejor prueba con el alemán. ¿Para qué estudias idiomas si no te gusta hablar con la gente?
Te ha contagiado el odio.
Ansiedad heladora. Ansiedad congelada, para guardar en vacas flacas, siempre hay para dar y tomar, exceso, extra, excedentes, helado azul de ansiedad, miedo y recelo.
No temo a nada.
Invoco el lenguaje, contra la anemia. Mis cuadernos son los estómagos de una vaca. No es un corazón. ¡No lo es! O vendría el vampiro, puede oler la sangre que fluye.
El estómago es más impersonal, hay hierba mojada, y no le gusta el agua.
El sol sí que lo soporta, mírale la cara azul, como la muerte. Chupó a un español y se volvió inmune a este sol, la luz que arrasa a los débiles de espíritu.
No hay vampiros en Budapest, pero entienden tu alemán, lo histriónico de tus ojazos.
Facilona.
Yo venía a hablar de mi libro. El libro de Sándor Márai, quiero decir, de Gyula y la muerte del padre, con esta luz de junio, the virgin suicides mood, ummm.
La cama helada en los pueblos, a mis pies les gusta la sensación tan fría en lo profundo de este futón, largo como un pozo.
Mis libros de la adolescencia, o sobre ella. Eugenides. Querido, querido público, gracias por—
Isra bravo, el Egon Schiele del copywriting. Como Loquillo, esas pintas.
Hmmm ¿La irlandesa borracha es Edna O´Brien?
La mujer, el amante y la otra. Un título a lo Edna o´Brien. Leerla antes de quedar dormida, para fugarme de Budapest, del salón de actos. Volver a mi pueblo.
Música de Air.
Y de Mercromina, sonando el tema Evolution.
Algo así me llevaré de Budapest. Un perfume del aeropuerto, l´élan, l´allure.